Hay momentos en la vida...

En los que una sola decisión, en un solo instante cambia irremediablemente el curso de las cosas. Cuando decides disparar a alguien, cuando decides quererlo o no quererlo, cuando decides mentir, traicionar, ocultar, o cruzar la línea, esa décima de segundo podrá hacer girar todo al lado oscuro, o inundarlo de luz. Podrá hacer de ti un héroe o un criminal, podrá llevarte al cielo o al infierno, pero siempre será un lugar desde el cual no podrás volver a atrás.

Palabras.

Letras y más letras. Vocales y sílabas que forman palabras. A veces palabras bonitas, a veces palabras simples y a veces palabras largas. Activan la imaginación y te hacen soñar. Las necesitamos para hablar e incluso para querernos. Se escuchan o se leen, da igual, siguen siendo las mismas palabras. Llegan las frases: conjunto de letras que forman el sentido. El sentido de expresarse, el sentido de liberarse, el sentido de amarse. Luego las canciones: frases y más frases pegadizas que a veces nos dicen algo y otras veces solo hablan; unidas con ritmo. Escribimos palabras que llegan al corazón y palabras que nos hacen odiar. Pero al fin y al cabo son eso, palabras.

Pero..

No digo nada. Sólo huyo. Porque tengo miedo. Ensayo una mirada de desprecio, pero no me sale y tengo que mirar hacia otro lado. Vuelvo a huir. Me encamino a la puerta, no sé si abrirla para correr o para empujarla fuera. Me detengo. Porque noto su presencia tras de mí. Y quiero sentirla un poco más. Sólo unos segundos más.

Cuando..

Somos niños soñamos con cosas pequeñas, sencillas... un helado de fresa, una muñeca que llora y hace pís o esa bicicleta que tiene el vecino del cuarto.

Cuando nos hacemos mayores, nuestros sueños cambian con nosotros, se vuelven complejos como nosotros. Y de repente, la muñeca de trapo se convierte en un vestido nuevo, con él que cruzar un océano a 10.000 metros de altura para deslumbrar a tu enamorado en un viaje sorpresa.

Pero los sueños se rompen en pedazos cuando se topan de frente con la realidad, porque la realidad, a menudo es radicalmente distinta a como uno cree que és. Las personas no siempre son lo que aparentan ser, ni las relaciones, ni mucho menos los sueños. Y esa realidad es la que se encarga de poner a cada uno en su sitio. Lo que uno cree que es negro, puede ser blanco, y lo que uno cree que es blanco, probablemente sea de todos los colores del arcoiris. Uno sabe como empiezan las cosas, pero nunca saben como van a terminar...

...

Y he tomado una decisión. Quiero dejarlo todo a mis espaldas para que ninguna de las páginas de mi nueva vida pueda tener el regusto del pasado.

A veces

A veces nos empeñamos en luchar contra imposibles, en querer que todo suceda como queremos, y no somos capazes de aceptar que nosotros no movemos los hilos de la vida, que hay cosas que no dependen de nuestros deseos...

No es resignación, es aceptación.

Hay veces que luchar contra un imposible, además de resultar inútil, puede hacernos mucho más daño que el hecho en cuestión.

Ahora o nunca.

En la vida hay un instante en que se sabe perfectamente que ha llegado el momento de saltar. Ahora o nunca. Ahora, o nada será como antes. Y el momento es éste. Saltar.

:)

Las mejores soluciones las encuentras al vuelo.

Están ahí, en el aire, listas para nosotros. Basta con atraparlas. Depende siempre del momento que estemos viviendo, claro, pero pensar demasiado en una cosa puede estropearla..

El Miedo.

A veces el miedo es realmente algo terrible. Te impide disfrutar de los mejores momentos. Si no sabes vencerlo, es como una especie de maldición.

Tengo ganas de tí. Federico Moccia.

En algunas ocasiones, los demás no existen. Y ésta es una de esas ocasiones.
No hay nunca un porqué para un recuerdo; llega de repente así, sin pedir permiso. Y nunca sabes cuando se marchará. Lo único que sabes es que lamentablemente volverá.
Entre ruinas del pasado y el placer del presente.

Cuando pierdes el tiempo al teléfono, cuando los minutos pasan sin que te des cuenta, cuando las palabras no tienen sentido, cuando piensas que si alguien te escuchara creería que estás loco, cuando ninguno de los dos tiene ganas de colgar, cuando después de que ella ha colgado compruebas que lo haya hecho de verdad, entonces estás perdido. O mejor dicho, estás enamorado, lo que, en realidad, es un poco lo mismo...
Y en un instante recuerdo todo lo que no he podido decirte, todo lo que hubiera querido que supieras, la belleza de mi amor. Eso es lo que hubiera querido demostrarte.
Solo con el destino de mi pasado.
Y la miro. Pero no la encuentro.

Entonces voy a buscar esa película en blanco y negro que ha durado dos años. Toda una vida. Esas noches pasadas en el sofá. Lejos. Sin conseguir darme una explicación. Arañándome las mejillas, pidiendo ayuda a las estrellas. Fuera, en el balcón, fumando un cigarrillo. Siguiendo después ese humo hacia el cielo, arriba, más arriba, más aún... Allí, donde precisamente habíamos estado nosotros.

Nunca digas nunca..

Y cuando menos te lo esperas, cuando crees que todo va en el sentido equivocado, que tu vida, programada en cada mínimo detalle está naufragando... de repente, sucede.

Perdona si te llamo amor. Federico Moccia

La vida pasa.. amores que vienen y van. Miradas enfrentadas. Confusiones, engaños. Estaciones, frio, calor.. todo.. y luego nada. Lo que fácil viene.. fácil se va. Incertidumbres. Te quiero.. y ahora no. Desdichas, deseos, ¿un café? Te espero en la plaza. Sonidos de coches, sirenas, ruido, gente que rie, que llora, que desespera. Un recuerdo amargo, mezclado con el chocolate de las seis. ¿Estas en casa? Despedidas, lágrimas que no cesan. Sesiones de cine donde la pelicula poco importa. Secretos que se guardan bajo la almohada. Labios que se muerden. Caricias entre lineas. Un quizás que flota en el aire. Llamaradas que se transmiten con los ojos. ¿Sal o pimienta? La vida en sesenta segundos. A veces él. A veces todos. Un sueño o quinientos. Extremos que se juntan en un abrir y cerrar de ojos y, sobre todo, ¿azul mar? No, azul cielo.

:(

Los sueños se rompen en pedazos cuando se chocan con la realidad, porque la realidad, a menudo es radicalmente distinta a lo que uno cree que es..

Felicidad

- Oh, si cada minuto de mi vida estuviera lleno de momentos

perfectos como este, nunca más volvería a quejarme de que mi vida no vale nada...

- Pero nadie tiene la vida llena de momentos perfectos,y si fuera así, dejarían de ser perfectos, serían normales, y,.. ¿entonces como conocerías la felicidad si nunca experimentaras bajones?

Y ahora es cuando me pregunto..

¿Será cierto que el secreto de la felicidad no es hacer lo que uno quiere, sino querer lo que uno hace?.

Soledad

Y yo batallo con mi mente y hago todo por ganar
pero siempre esta presente esta maldita soledad
esta que me tiene prisionera de la cárcel del recuerdo.

"El tiempo azota mi mente,apenas tengo espacio para respirar;

soy el viento que barre el desierto ya solo me queda, soledad, soledad que me la impuso el recuerdo, soledad maldita soledad, a veces, el mar trae a mi cuarto poniente que azota mi ventanal y mi cuerpo es la sombra de aquel que solia luchar."

Hace unos años

Hicieron una encuesta a cien internautas para que votaran; que tres fotografías consideraban las mejores de la historia.

La primera escogida era una instantánea de la bomba atómica lanzada sobre Nagasaki.
La segunda mostraba la primera vez que el hombre pisaba la luna.
Pero la tercera fue la que más me gustó. Mostraba dos enamorados besándose, mientras el mundo gira a su alrededor.

Me gusta saber que entre las tres fotos más importantes de la historia están dos enamorados, congelados en un beso interminable, refugiados contra el olvido.

Quizás es eso lo que sentimos cuando vemos fotografías antiguas, que por ellas no pasa el tiempo, como esos mosquitos atrapados en ámbar durante millones de años. El mundo sigue adelante, pero ellos se quedan ahí atrapados para siempre sin cambiar, como las fotos guardadas en una caja de zapatos o una cartera instantáneas de otro tiempo. Que ya nunca volverá..

La Vida

¿ Qué es la vida?

Es una pregunta que nos hacemos muchas veces, y para la cual cada uno encuentra una respuesta diferente, su propia respuesta.

Para mí la vida es un gran camino, con sus bifurcaciones, sus caminantes, sus piedras, sus flores y por supuesto, sus sentimientos y emociones.

En ese camino te encuentras con todo tipo de sentimientos, con el dolor, la alegría, la falsedad, la simpatía, la bondad, la libertad, la locura, la desesperación, la tristeza, la amargura y a veces, pero solo a veces, a la felicidad.

Claro está, que como bien dice ese refrán, "todo lo que empieza acaba" , pues el camino acaba, más tarde o más temprano, con unas experiencias u otras pero acaba.

Esto para algunos es algo horrible, para otros es un consuelo, otros sin embargo no piensan en esto y hay quien lo ve como la solución a sus problemas. Yo creo que la vida no es algo que se deba planear o pensar, simplemente hay que vivirla, con todas sus consecuencias.

Y como dice la letra de una canción..

La vida no espera, no avisa ni se hace tu amiga. La vida es un juego con una partida.

Nos trata de tú, nos grita y nos mima. Nos reta. Nos pone un examen al día.

La vida es lo único que manda en la vida. La vida no es tuya, ni tuya, ni mía.

La vida es la vida, nos pone y a veces.. nos quita.

Verdades

Al final lo que verdaderamente cuenta...

son las verdades guiadas por el corazón y tarde o temprano uno acaba topándose con la horma de su zapato...

No?.

Y así después de esperar tanto, un día como cualquier otro decidí triunfar…

Decidí no esperar a las oportunidades sino yo misma buscarlas, decidí ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución, decidí ver cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasis, decidí ver cada noche como un misterio a resolver, decidí ver cada día como una nueva oportunidad de ser feliz.

Aquel día me di cuenta y descubrí que mi único rival no eran más que mis propias debilidades, y que en éstas está la única y mejor forma de superarnos. Aquel día dejé de temer a perder y empecé a temer a no ganar, descubrí que no era yo la mejor y que quizás nunca lo fui. Me dejó de importar quién ganara o perdiera; ahora me importa simplemente conocerme mejor que ayer.

Aprendí que lo difícil no es llegar a la cima, sino jamás dejar de subir. Aprendí que el mejor triunfo que puedo tener, es tener el derecho de llamar a alguien “amigo”.

Descubrí que el amor , ese extraño sentimiento del que todos hablan, es más que un simple estado de enamoramiento, «el amor, es una filosofía de vida».

Aquel día dejé de ser un reflejo de mis escasos triunfos pasados y empecé a ser mi propia tenue luz de este presente; aprendí que de nada sirve ser luz si no vas a iluminar el camino de los demás.

Aquel día decidí cambiar tantas cosas… Me dí cuenta de que hay que luchar por lo que quieres.

Aquel día aprendí que los sueños son solamente para hacerse realidad.

Desde aquel día ya no duermo para descansar… ahora simplemente duermo para soñar.

Felicidad en dosis perfectas

¿Ves el Sol?. Lo saco yo. Y lo hago para tí.

¿Ves las estrellas?. Bueno.. evidentemente aquí en Madrid es muy difícil ver las estrellas, pero si alguna vez has estado en un paraje inhóspito (véase cualquiera sin contaminación) las habrás visto.. enfín todo para decirte que las estrellas una a una las he puesto ahí para tí.

A lo mejor eso tan romántico de sacar el Sol, las estrellas, Marte o Saturno no lo he echo nunca ( ojo, que no quiere decir que si pudiera no lo haría), pero sabes que mil y una cosas si que he echo por tí. Aunque si me parara a analizar la situación con tranquilidad y paciencia ( que no me sobra, todo hay que decirlo) más bien tendría que decir que todo lo hago por mí. Si, aunque parezca mentira lo hago por mí. Porque hacerte feliz, verte sonreír y estar contigo es lo que me da la felicidad en dosis perfectas (que científico todo :D).

Tú y tus mil tonterías, y tú y tus cosas que hacen que aunque tenga ganas de quedarme tirada por cualquier rincón, de estar ahí sintiéndome una maldita desdichada, me dé cuenta de que en realidad no podría ser más feliz. Por tu culpa.

Te quiero créeme, lo hago por puro placer. Y a todas horas. Y todos los días. Y no desde siempre. Y tampoco te puedo decir que para siempre, pero oye, aún así te miro, te sonrío, te beso, te cojo de la mano y sigo para adelante.

Y todo esto para qué, te preguntarás. Para darte las gracias. Gracias por ser tú y por hacerme ser yo. Eres la mejor persona (subrayemos lo de persona) que conozco.

Y como ya me habrás preguntado 28 millones de veces que si esto va para ti, te lo aclaro.

Sí, sí. Es para ti. Total y completamente. Hasta la última coma. Igual que hasta mi última célula es para ti.

Y yo más y antes.

El Insomnio

Se terminó el insomnio, parece increíble pero cierto, llegó el sueño, los relojes que nunca se pararon ante nada siguen el transcurso de la vida sin tener piedad por alguien que pide un minuto más.

El señor del tiempo ha echo ver que a través de su amante llamada la noche compuso la dura melodía del insomnio.
Después de recibir tantas buenas palabras por mi forma de escribir y expresarme, hoy les doy una alegría a esas personitas que siempre estuvieron ahí apoyandome y deseando que hiciera algo parecido a esto.

Muchos se preguntaran el porque del nombre de este blog, y esque hay momentos en los que se escriben ideas trasnochadas de noches sin poder dormir, y esas ideas salen a la luz de alguna manera y mi manera es esta.
Yo no fantaseo con la vida, al igual que escribo sobre la dulzura del más fiel amor, también hago caso a la otra cara de la vida.
Y desde aquí, intentaré sacar lo mejor de mi misma. Prometido.
Un besazo desde la oscuridad que embarga mi alma al hacerse despedida.