El Real Madrid vence (0-1) al Barcelona y se proclama campeón de la Copa del Rey.

Hoy para mi es un orgullo hacer una crónica sobre este partido. Para mí el fútbol no es un deporte cualquiera, es algo más que eso, un estilo de vida. Mi vida.
Pero vamos allá.
Ayer, el Real Madrid se proclamó campeón de la Copa del Rey 2011 trás un esfuerzo sobrehumano de este.
Minutos antes del partido, ya se podía apreciar la cara de todos los aficionados. La mayoría pensaba que esta copa ya estaba ganada para el equipo azulgrana. Había muchos nervios, mayoritariamente por parte del equipo blanco.
Entran los jugadores al campo y suenan ambos himnos. Los nervios se apoderan y la felicidad también.
La primera parte del partido, estuvo dominada en mayor parte por el Real Madrid. Parecía que la nueva táctica de Mourinho comenzaba a tener efecto. Esta, consistía en formar un muro, constituido por Pepe, Özil, Khedira y Di María en el centro del campo, con Cristiano Ronaldo de delantero. Frente a este, el Barcelona no pudo hacer mucho. Y es que aunque el Barça sea un gran equipo y un gran rival, cuando se encuentra afixiado por el rival se empieza a apagar poco a poco. Y Mourinho de eso sabe un rato, y lo demostró bastante ayer. El jugador, Cristiano Ronaldo estaba muy motivado, con dos ocasiones claras en la primera parte y haciéndose hueco entre Piqué y Mascherano varias veces.
Pero a pesar de ello, la primera parte llegaba a su final con pocos intentos del Barça por llegar a la portería y por un cabezazo de Pepé en el minuto 44 que podría haber sido un claro gol sino llega a ser porque el balón chocó con el palo.

Comienza la segunda parte y resulta ser más de lo mismo. Esta vez quién mantiene el claro control del balón es el Barça. Mucho más concenciado de la Copa y mucho más seguro de sí mismo. Este tuvo muchas oportunidades de encajar el gol en la portería, pero Iker Casillas una vez más logró salvar al Madrid. Los protagonistas de esta parte eran Messi e Iniesta con un gran juego entre los dos y con muchas oportunidades de gol. El partido se empezó a nublar por parte de Villa y Sergio Ramos ya que estos tuvieron grandes encontronazos durante todo el partido.
El Madrid estaba asustado e inquieto, no podía más y mostraba cansancio en sus rostros pero consiguió levantarse. Tardó media hora para ello pero mereció la pena. El Madrid no estaba muerto. La primera parte acaba y se daba paso a la prórroga. Media hora más de sufrimiento y entusiasmo por parte de ambos equipos.
La primera mitad de la prórroga parecía tener la misma espina que la segunda mitad. Volvía a estar dominada de nuevo por el Barça. Hasta que en el minuto 102, un rápido Cristiano Ronaldo sorprendía a todos los presentes con un remate de cabeza que daba lugar a un gol más claro que el agua que convertiría al Madrid campeón de la Copa del Rey. Se acababa la mala racha. 18 años insufribles sin ganar este premio. La celebración de este gol fue también protagonista en este encuentro por parte de Pepe, que hizo un corte de mangas a la grada del Barcelona.

Todo no acaba ahí, todavía quedaban varios minutos en los que el equipo azulgrana podía sorprender y dar lugar a un claro empate. Pero los minutos pasaban y cada uno de ellos se convertía en un contrarreloj para el Barça.
El Madrid no desfallecía, cada minuto que pasaba lo usaban para defender la Copa como si la vida se les fuera a ello. Quedaba un simple minuto, y un tiro de esquina por parte del Barcelona, esta sería la última oportunidad de estos para encajar un gol a Casillas, pero finalmente el partido llegó a su fin. Caras tristes por parte del equipo culé, Guardiola con lágrimas en sus rostros y una alegría inmensa por parte del Real Madrid que llevaba 18 años sin conseguir este premio. Claramente el Barça triunfó con su esplendido juego pero no dió sus resultados. Nadie confiaba en la derrota de este. 
El momento más especial para mí fue la levantada de la Copa por parte del capitán Iker Casillas. Una gran alegría recorría mi cuerpo en esos instantes. 

Ahora nos esperaba la celebración en la Cibeles para dar la bienvenida a los campeones. Yo por desgracia no pude ir a ver el partido a Valencia pero sí que pude ir a la Cibeles. Eran las 4 y media de la mañana cuando por fín el equipo blanco se asomaba a lo lejós. Miles de merengues recorrían las calles son su camiseta blanca. Los jugadores estaban felices. 
Yo por fín me estaba emocionando al verlos desde lejós pero algo acababa de pasar y la furgoneta en la que iban no avanzaba. Sergio Ramos dió lugar al momento más gracioso de la noche al resbalarse la Copa de sus manos y siendo atropeyada monumentalmente por la furgoneta en la que iban. Tuvo que venir hasta el SAMUR. Por un momento pensé que la harían el boca a boca. Pero no.
Por fín llegaron alrededor de las 5.
Pero finalmente la alegría seguía en nuestros ojos y en nuestras caras cuando Casillas coronó a la Cibeles con la bandera blanca y le dió un pequeño beso. Ahora nos toca descansar y recuperar las horas de sueño a los madridistas ya que muchos de nosotros no hemos dormido nada.
Ahora mas que nunca simplemente puedo decir.. 


HALA MADRID!!